El trabajo y las obligaciones del día a día nos dificultan en múltiples ocasiones llevar una buena alimentación. Con frecuencia, arrancamos la semana proponiéndonos comer bien, pero algo se complica y al final acabamos tirando de comida precocinada o comiendo un menú rápido en cualquier establecimiento. Para resolver esta situación aparecen corrientes tan interesantes como el batch cooking. ¿Sabes qué es exactamente? Podemos definir el batch cooking como un tipo de cocina por bloques cuyo objetivo es dedicar un día a la preparación de alimentos para tener la comida lista toda la semana. Suena bien, ¿no te parece? El batch cooking, entonces, supone tener al menos tres o cuatro horas libres durante un día, tiempo más que suficiente para dejar preparada la comida del resto de semana. Aunque te parezca demasiado tiempo entre fogones, lo cierto es que acaba compensando si sabes organizarte bien.

La clave es la organización

Y es que la clave del batch cooking es precisamente esa, la organización. Gracias a esta estrategia no solo comerás más sano incluso aquellas jornadas en las que parece que el día no tiene horas suficientes. También te permitirá optimizar mucho mejor tu tiempo
Por último, ahorrarás dinero porque sabrás exactamente lo que necesitas, de ahí que solo compres lo que precisas para cocinar. De este modo, ya no se vencerá ningún alimento que tengas en el frigorífico porque lo tendrás todo bajo control. ¿Es batch cooking preparar cocido para toda la semana? Lo cierto es que no, dado que precisamente esta técnica de cocina se refiere a disponer de platos variados y no comer todos los días lo mismo.

Aprende a hacer batch cooking paso a paso

Acabamos de ver que la primera recomendación para abordar el batch cooking es organizarse bien. Vamos a ver cómo implementar esta estrategia paso a paso.

1. Planifica el menú

Lo primero de todo es sentarse a planificar el menú de toda la semana. Por supuesto, si no dispones de todos los ingredientes, deberás ir al supermercado a por ellos. Asegúrate de que en la planificación incluyes al menos dos clases de verduras a modo de acompañantes para los platos principales, un plato de carne, dos de pescado y algún que otro guiso de cuchara. Es muy importante también añadir varias frutas para llegar al mínimo recomendado por la Organización Mundial de la Salud.

2. Juega con los ingredientes

En la confección del menú y en aras de optimizar los ingredientes, la clave está en elegir componentes comunes a varios platos. Hay ingredientes como los pimientos, los huevos, el brócoli, el tomate o los espárragos que te servirán para diferentes preparaciones.

3. Aprovecha el tiempo de cocina

Se trata de aprovechar el tiempo de cocina al máximo, así que intenta preparar varios platos al mismo tiempo. Por ejemplo, mientras cortas las verduras, pon el agua a hervir. Exprime el espacio del horno todo lo que puedas: mientras se prepara el pescado, coloca en la bandeja inferior unas verduras cortadas.

4. Conserva bien los alimentos

Por último, no olvides la importancia de la conservación. Lo recomendable es utilizar táperes de vidrio, dado que es en estos recipientes donde se conservan mejor los alimentos, pues es un material que no absorbe olores ni sabores. Además, es muy fácil de limpiar. Puedes congelar unos y dejar en el frigorífico otros. Incluso, envasar al vacío puede ser una buena opción. La técnica del batch cooking resulta muy ventajosa. Si te interesa el mundo de la cocina y te gustaría profundizar, desde Emagister te recomendamos consultar la extensa oferta de cursos y másteres de la Escuela de Hostelería y Turismo de Benidorm y la Marina Baja.

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