Huella digital, ¿cómo protegerla dentro de la web?

Hoy en día la comunicación a través de medios digitales es una necesidad. Diariamente se utiliza la comunicación 2.0. Lo que debes saber es que esa forma de mantener comunicaciones deja una huella digital. Con eso nos referimos a nuestra identidad digital. Hoy te damos las claves para saber qué es este término y cómo debes trabajarlo correctamente.

¿A qué nos referimos con huella digital?

La huella digital se traduce en toda la información sobre una persona física o jurídica que se queda reflejada en la red. Podríamos decir que es como un rastro online. Suele contener todo tipo de información: imágenes, fotografías, teléfonos, datos personales, seguidores e incluso amistades.

Normalmente esta marca se crea cuando generas contenido y lo subes a la web a través de redes sociales, por ejemplo. Pero también existen otros métodos: blogs, noticias, artículos universitarios o publicaciones del estado. Son muchas las formas en las que tu información puede ser publicada y encontrada en Internet. Hay que entender que hasta lo más mínimo deja huella en el mundo digital. Por eso es tan importante protegerla.

Cuanto más activa es una empresa o persona en la red, más marca digital tiene. Sin embargo, no interactuar con los medios digitales no tiene por qué significar lo contrario. Todo el mundo tiene un registro online, aunque este sea pequeño y difícil de localizar. Tienes que saber que hasta la inactividad en línea comunica algo sobre ti.

¿Qué constituye el rastro digital?

Son muchos los elementos que componen la huella digital de una persona. Prácticamente cualquier cuenta que abres o cualquier cosa que realizas en la red deja un registro. Se entrega la información y se mantiene almacenada. Por esta razón, debes vigilar lo siguiente:

– Las redes sociales que usas y cómo muestras la información dentro de ellas. Al igual que nuestros correos electrónicos y las suscripciones a aplicaciones y páginas web.

-Las fotografías y vídeos que subes. Debes cuidarlos porque pueden perjudicar tu negocio o imagen personal.

– Los comentarios que publicas en Internet o que otros publican en tus perfiles. Esta información permanece mucho tiempo en la red, incluso, al borrar la cuenta. Por lo tanto, cuida las opiniones que generas.

– Los contactos que se acumulan en las cuentas online.

-Tu nick o nombre en las diferentes plataformas sociales.

¿Cómo trabajar la marca digital?

Lo cierto es  que la identidad digital se puede cuidar y trabajar. Se pueden crear huellas que no correspondan al 100% con la identidad real. Pero también se pueden exagerar las cualidades reales en tu rastro para comunicar exactamente lo que te interese. ¿Cómo se puede hacer esto?

Crea un personal branding

La mejor manera para trabajar la huella digital de una persona física es a través del personal branding. Esto es una estrategia que intenta hacer que los profesionales de determinados sectores tengan características y atributos diferentes. Así, se diferenciarán de otros competidores de su misma área. Dicha técnica es frecuentemente utilizada por los profesionales de los negocios y el marketing. Principalmente se usa en la búsqueda de trabajo y de relaciones laborales.

Una vez que decides trabajar la marca personal para cuidar tu rastro digital, hay que crear un plan de acción. Tienes que cuidar el tono de voz que transmites en las comunicaciones. Esto quiere decir que todos tus mensajes deberán seguir un patrón de lenguaje similar. También es recomendable que utilices el mismo estilo fotográfico siempre. Incluso puedes crear uniformidad en el estilo de los gráficos. De esta manera, conseguirás que la comunicación sea uniforme y transmita el mensaje de tu estrategia.

Cuida la huella digital de una empresa

Si lo que quieres es trabajar la identidad de marca digital de tu empresa, debes optar por otro camino. Lo mejor es trazar una estrategia de comunicación y de marketing digital. Para ello es muy recomendable que tengas un equipo adecuado de expertos que incluya, entre otros puestos, el de social media manager y community manager.

Ellos serán los encargados de cuidar y trazar el rastro digital de tu empresa. ¿Cómo? Con acciones digitales como la creación de contenido para blogs, la creación de campañas de marketing digital, la comunicación de mensajes en redes sociales y el trato al cliente a través de medios digitales.

Trabajando todos estos aspectos, tanto para una empresa como para una persona particular, conseguirás mejorar la reputación online. Pero, ¿sabes qué es este término?

¿Qué es la reputación online?

La reputación online es un término estrechamente relacionado con la huella digital. Es por ello que muchas personas tienden a utilizarlos como sinónimos. Aunque mantengan una estrecha relación, no son lo mismo.

El rastro digital es, como ya se ha mencionado, la huella que deja una persona o empresa por sí misma. Por otro lado, la reputación digital es lo que el resto de la gente dice de esa persona o empresa. Es decir, sobre la reputación online se tiene poco o nada de control. Esta reputación puede varias según tus acciones.

¿En qué afecta la reputación online negativa?

Además, la reputación online puede ser positiva o negativa. Una mala fama en el caso de una persona puede darse por un trabajo mal hecho, por enemigos o personas que le tengan algún rencor o incluso por alguna fotografía que incomode a un grupo de gente. En estos casos el tema es grave y reparar el daño llevará tiempo. Sin embargo, es casi peor si la reputación digital es mala para una empresa.

Un cliente descontento puede crear una mala imagen de la compañía y la notoriedad de una marca en Internet. Puede llegar a escribir verdaderas barbaridades sobre tus productos y servicios en redes sociales. Esto hará que tu prestigio baje y afectará negativamente a tus ventas.

La buena noticia es que todo se puede solucionar. Existen técnicas para mejorar tu reputación online y conseguir así que tu huella digital este protegida.

Fuente: Esneca Business School