Particularidades del diseño editorial moderno

Más de uno se cuestiona a qué hace referencia el concepto de diseño editorial moderno. A continuación verás todo lo que necesitas dominar sobre las particularidades de esta disciplina técnica y gran cantidad de salidas laborales. ¿Nos sigues?

El diseño editorial actual

El diseño editorial es un sector que pertenece al diseño gráfico cuya misión principal es diseñar y componer de forma correcta diferentes tipos de publicaciones.

Se trata de planificar, clasificar y ordenar todo el contenido de revistas, libros, periódicos, publicaciones, etc. Dicho de otra manera, se responsabiliza de la arquitectura de las divulgaciones. Tal y como define el reconocido director de la revista Speak Magazine, Martín Venezky, el diseño editorial moderno es el contexto por el que una historia concreta se lee, se transmite y se comprende.

Una misma divulgación puede emitir sensaciones diferentes a cada lector, por eso resulta tan básico conocer bien las características esenciales de cada idea. Un diseño editorial moderno destacará las cualidades propias de cada información y hará que resulte más fascinante.

Como resumen, el medio de comunicación escrito que desee administrar información o dar alguna opinión necesita un gran diseño y maquetación editorial.

Componentes del diseño editorial

Todas las publicaciones, a pesar de sus disparidades, comparten una serie de características que debe conocer sobradamente un buen diseñador editorial.

El formato

Esta característica hace  hincapié básicamente a la forma y al tamaño. Tiene que ver con su declaración física o digital. Es esenciall evaluar cuál va a ser el formato preciso para cada soporte; un error aquí podría ser definitivo y descartaría todo el trabajo anterior de redacción.

La retícula

Es la caja tipográfica donde se escribe el texto. Aunque sea invisible para el lector, tiene mucha importancia en el diseño, ya que divide y da coherencia a los diferentes contenidos.Por si fuera poco, equilibra la estructura de las páginas. Sus componentes son:

• Márgenes
• Columnas
• Módulos
• Zonas espaciales
• Medianil
• Líneas de flujo

La fuente

La tipografía es la expresión óptica de las ideas. Comprende todo lo relacionado con las letras, los números y las alegorías de un soporte físico o digital. Escoger una letra u otra vendrá determinada por tres factores; el mensaje que se desea conocer, el público al que va dirigido y, por último, la configuración del libro.

El color

El color denota alegría, activa la atención y espolea los sentidos. Muchos estudios confirman la virtud de de los colores para transferir sensaciones y emociones. La elección del color es un factor esencial para establecer una buena sintonia entre el contenido y su marco visual.

Los elementos gráficos

Una imagen vale más que mil palabras. Un gran texto no sirve de nada si no le acompaña una imagen pertinente.

Hoy en día, el diseño editorial moderno consta de muchos elementos gráficos. Mapas, tablas, gráficas, dibujos o infografías completan  el texto y le dan sentido.

Singularidades de un buen diseñador editorial

La primera y principal finalidad del diseñador editorial debe ser conseguir captar la atención del lector entre una gran cantidad de libros, periódicos y publicaciones que tiene a su disposición.

Es por este motivo que el diseñador editorial debe focalizar su trabajo hacia esa meta, aumentando la creatividad y buscando la imaginación. Una portada memorable puede hacer triunfar a un libro incluso antes de ser leído.

Para ser un buen diseñador gráfico y editorial no hay que pasar por alto una serie de variables en el momento de maquetar y diseñar. Y es que de dichos elementos dependerá que el trabajo consiga llamar la atención del lector.

Legibilidad

Un hecho básico de cualquier texto es que sea ameno y sencillo de leer. Si el lector se aburre pronto, significa que no se ha conseguido la finalidad. Por esta razón, hay que escoger una fuente legible, agradable y específica para cada tipo de publicación.

Actualmente hay grandes y exquisitos procesadores de textos, los cuales poseen completísimos portafolios donde encontrar la fuente ideal. Eso sí, se debe tener temple y ser perseverante.

Fuente limitada

El uso de muchos tipos de fuentes distintas en el mismo texto no es recomendable, ya que genera desconcierto y puede llevar al cansancio visual.

Color y cuerpo

Esta es una sección básica del diseño editorial moderno. Hay que evitar el aburrimiento. Un sistema efectivo consiste en alternar el color del fondo y el contenido usando colores complementarios. De esta manera no se quitarán protagonismo alguno.

Interlineado

Hay que usar un interlineado que simplifique la lectura (un interlineado demasiado corto hace que las líneas se junten al leer). Se acostumbra a utilizar la regla del veinte por cien. Esta regla indica que el tamaño del interlineado tiene que ser un 20 % mayor que la dimensión de la letra.

Interletraje

También conocido como densidad visual, el interletraje es ell espacio que hay entre cada una de las letras que forman el texto. Aunque parezca una característica más decorativa que funcional, el diseñador editorial debe tener en cuenta este concepto para calcular los espacios.

Si se busca un texto más señorial y refinado, debe aumentar el interletraje. Por otro lado, si se pretende tener más continuidad el espacio entre las letras debe reducirse (aunque esto puede afectar a la lectura del texto).

Desarrollo y modas en el diseño editorial

Muchos años han pasado desde que Gutenberg, en 1440, pasara a la historia como el creador de la imprenta. Desde entonces hasta hoy el mundo del diseño gráfico y el diseño editorial moderno no han dejado de transgreder y romper barreras.

En los últimos años, la irrupción de Internet ha significado la llegada de un nuevo formato en el diseño editorial moderno. Este es el de la edición digital.

Cualquier medio de comunicación que quiera hacerse un espacio en el complejo mundo de la comunicación visual debe tener su modelo digital. A esto se le une la presencia de muchas publicaciones que se difunden únicamente a través de la red, ya que es una forma mucho más fácil y productiva de iniciar un proyecto.

Esta competencia ha provocado que los diseñadores editoriales, apoyados por las nuevas tecnologías, innoven con nuevos y sorprendentes diseños y maquetas que consigan captar la atención del lector y centrar su atención.

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