De acuerdo con el informe Global Entrepreneurship Monitor Colombia del 2017, el 68,4% de los colombianos consideran el emprendimiento como una carrera deseable; sin embargo, el 70% de las empresas del país fracasan antes de cumplir los cinco años. Ante este panorama, consultamos a William Zuluaga, coordinador de la Maestría en Gestión Financiera de la Universidad Ean, quien nos brindó algunas recomendaciones para que los emprendedores administren bien el dinero y alcancen el éxito en sus proyectos.1.    Define si tienes un negocio o una empresa

Es importante distinguir entre una y otra para generar estrategias acordes con tus ganancias y tu nivel de crecimiento. Si has implementado un método que satisface alguna necesidad de los clientes y que también te provee una ocupación y éxito personal, seguramente tienes un buen negocio. Si tu negocio ya cuenta con una figura jurídica y puede crecer a largo plazo sin depender de ti, ya tienes una empresa. También, debes tener en cuenta que un buen negocio no siempre se convierte en una gran empresa.

2.    Separa los asuntos familiares de los de la empresa

El 86,5% de las empresas en Colombia son familiares y solo el 13% de ellas sobreviven por más de tres generaciones, según cifras de Confecámaras del 2018. Muchos de los problemas radican en la falta de estrategia a la hora de tomar decisiones y en la falta de claridad en los roles de cada miembro. Para evitar inconvenientes hay que definir las siguientes reglas: funciones específicas de los miembros de la familia, división de los bienes, órganos de control y mecanismos de sucesión.

3.    Analiza tu situación financiera a partir de datos reales

No te guíes por las opiniones subjetivas de familiares y amigos, mejor busca el apoyo del contador de la empresa, analiza datos como los estados financieros, aprende a interpretarlos y compáralos con los de empresas e industrias similares. Esto te permitirá tomar decisiones más acertadas.

4.    Evita solicitar créditos para gastos pequeños

A veces los emprendedores hacen grandes ventas a largo plazo y ese dinero no estará disponible hasta después de varios meses. Por eso, solicitan préstamos para pagar obligaciones del día a día y esa práctica es insostenible. No hagas un crédito diferido a un año para pagar los salarios de un mes.

5.    Planea y proyecta el crecimiento de tu empresa

Sí, el futuro es incierto, pero es primordial utilizar información confiable para proyectar tus ventas. Para ello puedes implementar estudios de prospectiva y buscar la asesoría de expertos. Además, es favorable estimar cada año los costos de producción y comercialización de tus bienes y servicios, luego compararlos frecuentemente con los costos reales y con base en las diferencias que encuentres, idear planes de mejora.

Fuente: Universidad EAN

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