La inteligencia artificial es una herramienta poderosa para la toma de decisiones

La inteligencia artificial ha sido la gran revolución de este siglo y uno de los avances tecnológicos que más rápido ha evolucionado. Este es el motivo por el cual la Universidad de Nebrija ha organizado un encuentro con Jesús Manuel Ruiz, data scientist de Minsait by Indra.

En el encuentro, este especialista se ha centrado en lograr que los asistentes comprendieran a cabalidad todas las aplicaciones que tiene la Inteligencia Artificial en la actualidad, especialmente en lo que respecta a negocios y empresas. El punto central de su ponencia fue que este tipo de tecnología permite que podamos “formar” otras máquinas para hacer lo que queramos, desde extraer conocimiento a partir de bases datos hasta repetir patrones. Igualmente, dedicó un fragmento de su charla a desmentir algunos de los mitos que se han creado en torno a la Inteligencia Artificial, como que va a terminar por reemplazar a los humanos. “La inteligencia artificial no viene para suplantar al ser humano, sino para ayudarle en la toma de decisiones”, afirmó.

El marketing es uno de los sectores en los que la AI ofrece mayores beneficios, pues permite realizar análisis de mercado, estudiar competidores, conocer al público, segmentar a la audiencia y obtener datos de consumo que permita mejorar el servicio y las ventas. La Inteligencia Artificial puesta al servicio del marketing permite optimizar la toma de decisiones porque es posible, más que nunca, conocer a profundidad a nuestro consumidor objetivo, recomendarle productos e incluso crearlos en función a sus necesidades.

El área de Recursos Humanos también se ve beneficiado por la AI, pues permite afinar los procesos de selección de personal, la toma de decisiones, la atracción de talento y un diseño organizativo mucho más optimizado.

A pesar de todas las ventajas que ofrece, la AI no es un asunto sencillo para todas las empresas o proyectos que funcionan dentro del mercado. Uno de los obstáculos es la cantidad de datos que son necesarios para llevar estos estudios de audiencia; no son necesariamente fáciles de conseguir y las empresas que los tienen se los reservan. Además, es necesaria una inversión inicial para poder crear modelos que puedan repetirse.

Ruiz finalizó su intervención, afirmando que mientras más evolucione la Inteligencia Artificial, mayores serán los retos éticos y será necesario ir adaptando las legislaciones para garantizar la privacidad de datos.

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